RELATO CORTO: UN MUNDO DE COLOR BLANCO
Las ideas inmaduras se gestan en la mente del indeciso.
Para estar lleno de defensas se necesita una inmunidad
que sea a prueba de desinteresados.
Los parsimoniosos pasos de la enfermedad social.
Son siempre inapropiados por eso siempre se gestan.
Dentro de la clase social mas desfavorecida, esta los sufre.
HE incuba dando como resultado, el estallido social.
Este discurso sacado de su mente dispersa
lo leía, y releía constantemente aquel anciano senil.
En su 132 cumpleaños todos le miraban, y le sonreía con ternura.
Era el anciano mas mayor de aquella residencia, estaba fuerte como un roble.
No tenia ningún familiar vivo los había enterrado a todos.
Siempre leía el mismo discurso le llamaban el rojo por sus ideas políticas
Varias décadas habían pasado por sus ojos y él todavía no se había dado
cuenta que la sociedad había cambiado, ya no existían clases sociales.
En el futuro todo eso ya estaba superado, el hambre del mundo, las guerras.
Pero él en su inmensa soledad solo leía libros , libros del pasado.
Se iba y venia en sus recuerdos y en su mente habitaba en dos mundos distintos.
En el mundo real en el que vivía, todo era en blanco, sin color.
Nunca recordaba nada era un inmenso vacío para él.
Muerto sus seres queridos no tenia nada por lo que luchar.
Por eso se sumergía en el pasado en el que se creía un revolucionario activista.
No recordaba nada de su presente a veces pensaba que seria por su enfermedad.
Pero ùltimamente veía a jóvenes en aquella residencia cada vez veía mas jóvenes.
Y menos viejos, eso era otro cambio en aquel mundo del futuro.
Quedaban pocos viejos no se veían viejos en aquella sociedad, los jóvenes
ocupaban las residencias, aquejados del mal de la mente vacía ò mente en blanco
Pensado en ello a él le pasaba igual su mente estaba en blanco.
Solo recordaba el pasado, y era gracias aquellos libros antiguos.
Cada vez sentía que la enfermedad avanzaba mas y cada día le costaba
mas encontrar libros del pasado.
un día no hubo forma de encontrar sus queridos libros del siglo XXI.
Y su mente no pudo alimentarse del pasado, y acabó de nuevo en aquel
presente en el que no recordaba nada, ni su vida, ni su familia, ni nada.
Su mente habitaba en una gran sala blanca, y se quedo sin palabras.
Dejó de recitar sus discursos, dejó de ser un viejo rojo y revolucionario.
Dejó de existir y un buen día ya no hubo filosofías, ni problemas, solo un mundo
en blanco.
FIN
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