Denunciar relato
Quisiera sentir su enésima mirada
La que apuñaló mi joven corazón
Jaula dorada y a la vez ventana
En contrapunto al calor del sol
Quisiera escuchar su sincera carcajada
La que dio tanta vida y el camino iluminó
Escudo de seda que paró tantas balas
Placebo soldado que abatía el dolor
Quisiera poder rozarle la espalda
Su suave piel de confortable pudor
La que sufriéndolo todo mi mano calmaba
Sensual estampa a la luz del amor
Quiera entender quien mandó llamarla
Cuando todo tenía y estaba en flor
Envidioso del suelo que ella pisaba
Y sin poder despedirme, me la arrebató
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