creo y pienso en vos

era domingo, nos habiamos levantado de dormir. cerca de las 11 de la mañana, veia que mi mujer no estaba muy bien. yo pensé y creí que estaba bien, ella me repetia: "ya se me va a pasar" varias veces. mi hija empezaba a despertarse y despues del baño vino a desayunar. pensé y crei que iba a ser un domingo comun. pero al escuchar decir por boca de mi mujer después de un par de horas "vamos!" supe que no iba a ser un domingo cualquiera.
ese dia jugaban mejico y argentina por los cuartos de final de la copa confederaciones. pensé y crei que lo iba a ver tranquilo y en casa. llamé a mi vieja para que cuidara a mi hija de casi 3 años en su casa para ir a la clinica que estaba a una par de cuadras. era la mas cercana que tenia por la obra social que usaba en ese momento. pero esta clinica no estaba capacitada para recibirla, tenian que hacer el traslado. de tantas idas y vueltas, nos hicieron esperar. el partido habia comenzado, pensé y creí que no lo podia ver, por suerte habia una tele en la habitación. no podia concentrarme mucho porque gabriela estaba adolorida. pensaba más en ella, tuvo que someterse a una dieta durante meses debido a que le detecataron una diabetes gestacional. a pesar de ser un dia domingo,
con un partido de argentina en el medio, pensé y creí que no iba a haber personas alrededor trabajando, es mas,  parecia un dia laboral.
termina el primer tiempo y nos avisan que nos llevaban a gregorio de laferrere, la otra clinica figueroa paredes que era especializada y contaba con la obra social. pensé y creí
que gabriela no iba a aguantar mas del dolor. pero lo logró, llegamos en 45 minutos a la clinica figueroa paredes despues de que el chofer de la ambulancia se equivocara de camino e hiciera parada en una clinica equivocada.
la recibieron en camilla, la llevaron a una sala y en el pasillo me dijeron: "esperá aca" todo estaba en manos de ellos. decidí quedarme a ver lo que quedaba del
partido. fueron a penales y ganó argentina, me acuerdo. después,  pensé y creí que iba a ser larga la espera. no habia ningún médico que saliera a avisarme. a los pocos minutos llegan mis viejos, sergio, y mi hermano. pensé y creí que no venian porque la clinica quedaba  muy lejos de casa.
al rato me llama una enfermera y me dice: "entrá y ponete esto. colocate ahi, al lado de tu esposa, sos sensible a ver esto?"

-no, ya vi documentales- le contesté.

-ah, bueno. porque hubo casos de desmayos.- me contesta.

pensé y creí en tantas cosas cuando entré a esa sala, pero ese dia no solo que tuve ideas equivocadas, sino que tuve una hermosa leccion. al acompañar a mi mujer
en el trabajo de parto dandole la mano y hablandole al oido mientras ella hacia el mayor esfuerzo de su vida, no pensé y no creí que iba a ser feliz de presenciar el nacimiento de macarena. no pensé y no creí que podia ser una de las tantas alegrias que me pudo tocar. pensé y crei que teniendo una hija, mi vida estaba hecha.por suerte me equivoqué.
despues de 9 años, mi hija macarena me enseñó mas lecciones que cualquier maestro. sin dictarme nada. con sus frases llena de inocencia, con su voluntad para ayudar y aprender. el talento que fue creando para dibujar, para jugar, para hablar. por todo eso creo y pienso en vos. creo y pienso en que vas a ser una gran persona, sincera, alegre, sentimental, divertida, servicial. lo digo mas allá de que sea tu padre, ese espiritu de alegria se siente. cuando vos lloras, por lo que sea, en mi interior hay lagrimas tambien. cuando te reis, contagias sonrisas complices.

creo y pienso que el dia en yo no esté fisicamente en esta tierra, tanto vos como tu hermana llevarán con andas mi legado. veré en vos las cosas que te enseñamos con nuestras virtudes y defectos, seguro que lo entenderas algun dia. entenderas porque te educamos lo mejor posible, o lo mejor que pudimos. estaré orgulloso con tu andar, con tus pensamientos, con tus alegrias y porque no con tus tristezas. por que eso hace una persona que siente las cosas. y estas sintiendo tu infancia a pleno.
solo queda por decir... feliz cumple macarena... y que seas feliz siempre, hija!