anecdotas de trabajo - sexto periodo

Por
Enviado el , clasificado en Varios / otros
1221 visitas

Marcar como relato favorito


tuve que buscar trabajo mientras estaba alquilando, tardé en conseguir que me pagaran la indenmizacion a tiempo. lo que me ayudó mucho fue el fondo de desempleo que cobraba cada mes por un año, hasta que consiguiera otro trabajo,
junto con mi amigo y vecino de ese tiempo, empezamos a trabajar juntos en la jardineria. ibamos con una bordeadora por aldo bonzi y ciudad evita. teniamos que tomar un colectivo que nos llevaban sin problemas. tuvimos mucha suerte
en que nos lleve. repartiamos volantes por todas las casas del lugar. haciamos una promocion de 50 por ciento de descuento en el primer corte. el estaba encargado de pasar los presupuestos y yo de los llamados.
cuando me mostró el volante terminado para repartir, el mismo decia "jardineria les mantenimiento de jardines". le pregunté que significa "les" y me dijo:
-mis sobrinos: lina, ezequiel y seba... por mi.
aunque era un detalle menor, el empezaba a marcar su interes. empezamos a trabajar y tuvimos un buen comienzo. pero el chino, no era bueno en el tema de presupuesto. yo no tenia idea porque era la primera vez que hacia eso, el estaba
de parte medico en la fabrica, y cuando volvió decidió arreglar su desvinculacion de la fabrica.
dias mas tarde se iria a italia y me deja en andas. despues de una discucion, empecé a trabajar en el vivero yara. ahi estaban la mayoria de mis amigos. gerardo, renzo, david, marcelo, fernando y un viejo particular... el chango.
lo primero que me dijo: "sos de faltar?" yo lo miro extrañado y no llego a contestarle. "porque acá son todos faltadores!" y se va a trabajar.
los primeros dias debo confesar que me tuvieron mucha paciencia, solo me dedicaba a limpiar y sacar las bolsas de basura con el chango. el sueldo no me alcanzaba para seguir pagando el alquiler, el fondo de desempleo terminó. junto con
el sueño de vivir los 4 juntos. volveria a la casa de mi vieja con todo el odio encima. en esos meses, empece a trabajr con fernando. el tenia unas maquinas que le habia comprado el hermano. saliamos los sabados o cuando terminabamos
temprano del vivero. el pensaba en grande, tanto que consiguió un edificio para prestar sus servicios. ese dia el hermano adrian fue a ayudarnos, pero no fue tan asi. de tanto pensar en que yo no servia y que no le podia convenir trabajar
conmigo, fernando decidió dejarme en buenos terminos con una charla no muy convincente. igual seguiamos trabajando juntos en el vivero, despues de unos meses le compré al dueño una bordeadora chica, caño curvo marca hoffco.
con esa bordeadora por un tiempo volveria a los clientes que estaban en aldo bonzi y ciudad evita. hice algunos volantes y empecé a repartir por ciudad madero. en un tiempo me acompañó david que el tenia la misma idea. fue con el unico que
trabajé a gusto y el que me enseñó bastantes cosas. nunca tuvimos una discucion, si algunas diferencias en cuanto al trabajo. al tiempo venderia sus cosas para cambiar de trabajo. a los dias compré una maquina cortadora de cesped del año 60.
esa reliquia me ayudaria a encontrar trabajo en los edificios. el primero era en ciudad evita que iba los sabados a las 8 de la mañana y volvia cerca de las 3. sin comer para no tardar tanto. despues de un año no fui mas porque la comision
cambió y tenian problemas con las expensas. en el medio de ese tiempo, iba y venia de ciudad evita y aldo bonzi. en el vivero yara, era casi una costumbre de que los compañeros falten sin aviso. y algunos directamente buscaban otro trabajo si avisar.
beto, el dueño, era de caracter. todos dicen que antes de que yo entrara a trabajar el no era asi de jodido. la separacion con su mujer fue determinante. de tantas idas y vueltas, al final quedabamos 3 personas. gerardo, el chango y yo. las tareas
eran mal dividas, no habia cambios de roles o rotacion. gerardo pasaba el tractor todo el dia, el chango hacia la limpieza y algunos canteros y yo hacia los bordes, pasaba la maquina y ayudaba en la limpieza. pasaron 2 semanas y no habia señales de
que llegarian nuevos empleados. hablé con beto por un aumento, aunque sea hasta que llegara alguien y el me contestó "imposible". asi que decidí hacer lo que hizo la mayoria, despues de un año y medio de faltar lo menos posibles y de presentarme
en dias de lluvia, no avisé que no iba mas. con los clientes que tenia me jugué por trabajar solo. a las tres semanas tuve un arreglo con el en el ministerio de trabajo mediando una suma de pesos para desvincularme. con esa conviccion empezé a transitar
mi destino.
una vez tuve un trabajo de desmalezado y tuve que llevar las dos maquinas, asi que fui caminando. habré tardado 45 minutos en llegar. en ese tiempo las piernas me aguantaban, a la vuelta y cerca de un vivero que ahora ya no está me encontré con mi
futuro jefe, julian. la propuesta que me hizo no era mala, ayudarlo y el me dejaba para hacer mis cosas. fue asi que despues de unos dias trabajé en el edificio de enfrente del 33  que era el 44. era mas chico y tardaba mas o menos 3 horas en hacerlo.
iba los sabados o los viernes. con julian trabajaba el padre que mucho no podia hacer por su avanzada edad. david se sumó mas tarde por un trabajo que julian le pidió. estuvimos unos meses hasta que julian empezó a perder el valor de lo que haciamos.
julian le dió las llaves de la camioneta a david un dia para hacer una editorial que quedada en ciudad evita. fuimos los dos, hicimos el trabajo y nos volvimos. cuando llegó la hora de la paga diaria, con beto era semanal, julian no le reconoció el traslado.
david empezaba a despedirse de a poco despues de ese hecho.
al mes llegaría dario, el hijo de un amigo intimo de julian. con este nos reiamos de todo y formamos una dupla de trabajo muy veloz. la pasabamos muy bien hablando, me invitó al cumpleaños de su hija y varias veces fui a su casa. pero julian, otra vez cometeria el
pecado de no valorar el esfuerzo. la plata no alcanzaba y dario se termino yendo. en lo personal siempre dije que julian era una muy buena persona, pero era muy mal organizador de trabajo. siempre me comentaba lo que gastaba de los insumos y demas cosas,
hubo una cuenta que no me cerraba, al principio el tenia 2 edificios, cuando empecé a trabajar con el despues de unos meses, tuvo 14. le tuve que pedir un aumento, porque lo unico que hacia para ayudarme era prestarme algunas herramientas o alcanzarme a tal lado.
un par de meses despues llegaria martin, un flaco que puso como condicion "yo necesito hablar media hora con mi novia todos los dias por telefono". extremista y paranoico, ese seria mi ultimo compañero de trabajo.


¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed