El artista

Había algo en su interior que latía con fuerza. Llevaba ya algún tiempo deseando crear, inventar algo nuevo, exportar ese algo que estaba dentro de su ser queriéndose expresar. Recibía influjos de energía y sus manos se movían ansiosas, intentando tal vez coger un lápiz o un pincel y dibujar alguna obra, o coger un cuaderno y narrar alguna historia. Su cuerpo a veces también ansiaba moverse, volar, bailar con el universo y con la música que escondía su interior. Después, sin saber cómo ni por qué, toda la energía desaparecía y se sentía cansado, perdido, intentando recordar tan sólo aquella inspiración que le había invadido y le había hecho sentir como un ser mágico. Víctima de sus cambiantes estados de ánimo, por momentos se decía a sí mismo que era un gran artista que tan solo necesitaba encontrar el momento idóneo para crear, y momentos después se decía que ningún genio necesitaba un momento especial, ya que él ya era especial en sí mismo. Fuera como fuese, genio o no, sabía que era posible recibir la magia del universo e inventar los sueños.

El artista es un genio creador, un ser que percibe la belleza y es capaz de expresarla de alguna forma para que los otros puedan disfrutarla. Al fin y al cabo, ser un artista es algo increíblemente fácil, la mayoría de las veces lo único que tienes que hacer es sacar fuera de ti algo que ya tienes dentro, algo que ya existe en tu cabeza, y simplemente tienes que expresarlo de la mejor forma que sepas, ya sea con palabras, pintura, imágenes  o movimientos.  Tal vez el artista solo pretenda hacer de este mundo un lugar más mágico. Debe de tratarse de allguien que vive tranquilo y disfruta de la vida y de las cosas que le rodean.