Cibersexo con mi exnovia

Coincidí con ella en un bar en las fiestas del barrio. No la veía desde hacia mas de 10 años, pero seguía tan guapa como siempre. Marta fue mi primer amor con 13 años, un amor muy inocente sin sexo ni nada parecido, pero fue muy intenso. Ahora ya tenemos 41 y ambos estamos casados y con hijos. Nos abrazamos, charlamos un rato y nos dimos los teléfonos. Ya en casa mi mujer se fue a la cama pronto, como casi siempre, así que pensé que seria un buen momento para hablar con Marta. Hablamos de como nos iba la vida, su marido siempre estaba viajando por trabajo y se sentía sola. Mi matrimonio pasaba por un bache de pasión y yo me sentía un poco bajo de moral. Hablamos durante una hora hasta que Marta se despidió para irse a la cama.

-¿Tu también te vas a la cama?, me preguntó.

-No Marta, antes voy a masturbarme, llevo dos semanas sin sexo y necesito un ratito de relax. Si te apetece...puedes verme por cam..

Marta no dijo nada durante unos segundos, pero le dio morbo la idea de verme desnudo.

-Vale, pero yo no tengo cam.

-

No pasa nada Marta, solo saber que me miras me excita muchísimo.

Le di mi Skype y conectamos. ¿Me ves? le pregunté tumbado desnudo en mi sofá con solo un trapito sobre mi sexo.

-SI, te veo, y veo que estas muy bueno Iván, no creía que tuvieras el cuerpo depilado.

-¿Te gustaría ver más?, le dije con voz pícara pasando mi mano por encima de mi polla.

Marta estaba excitada e intrigada a la vez...se moría por verme desnudo. Estiré suavemente del trapo hacia mis pies y dejé ver mi polla erecta y depilada moviendo a la vez mis caderas.

-¡¡¡¡Ostias¡¡¡¡ exclamó Marta, menudo pollón tienes Iván, dijo mientras pasaba sus manos sobre sus pechos. Dame un momento que me voy a poner cómoda, dijo suavemente. Se levantó de la silla y se quitó rápidamente toda la ropa. Se volvió a sentar poniendo un pie a cada lado del ordenador sobre la mesa, dejando su sexo húmedo al alcance de sus manos.-Ya estoy Iván, me he puesto cómoda, me has puesto caliente y quiero masturbarme contigo.

Yo comencé a mover las caderas imaginando que Marta estaba sentada sobre mi polla erecta. Marta jugueteaba con su vagina imaginando mi polla entrando y saliendo de su sexo caliente y húmedo. Sus dedos viajaban de su sexo a su boca y otra vez a su sexo, mientras jadeaba viéndome en la cam, absolutamente entregado a ella.

-Sabes, a veces juego con mi vibrador anal mientras de masturbo, le dije mientras se lo mostraba por la cam. ¿Te apetece que lo use para ti, Marta?

-¡Oh Dios, por supuesto¡¡dijo pellizcando sus pezones con una mano y penetrándose con la otra.

Puse lubricante con mis dedos en el vibrador y comencé a darle uso a mi juguetito mientras imaginaba a Marta desnuda al otro lado del ordenador.

Marta alternaba empezó a simultanear también sus toqueteos entre su vagina y su ano, moviendo las caderas cada vez mas rápido.

-¡Me voy a correr Ivan¡¡¡¡Ahhhg¡¡¡¡Siiii¡¡¡¡¡

Sus gemidos por el micrófono al correrme me excitaron aun más y no pude contenerme.

-Ha sido maravilloso, dijo Marta, puede que algún día lo hagamos realidad.

-Ojala¡¡ exclamé yo.

Marta se despidió de mi y se fue a la cama, encantada de haberme vuelto a ver....y yo también. Jamás olvidare la excitación que sentí al sentirme observado por ella, mi primer amor.