Denunciar relato
Ya nada como antes es, mi vida cada día de capa caída va. Me levanto de la cama, para acostarme en el sofá, apenas como, no tengo hambre, a mi madre veo llorando, para que coma un bocado. No puedo pensar con claridad, me cuesta tanto hablar, no puedo llorar, ni reír, porque asertiva estoy, todo me da lo mismo y en nada colaboro. Se me olvidó cocinar, no sé ni siquiera limpiar. ¿Me estaré volviendo inútil? Todavía joven soy y no me quiero rendir, aunque esta enfermedad, no me haga más que sufrir.
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