Caminaré deprisa hacia el túnel de la luz, ya no quiero estar aquí. No se puede arreglar lo que ya está roto. Caminaré en silencio, ya no queda nada más que decir. Mi corazón dejó de latir. Caminaré hasta alcanzar el cielo y me convertiré en una estrella más del universo. Caminaré con la cabeza al frente, afrontando todas las adversidades que se me presenten. Caminaré tropezando con los recuerdos, intentando durante el trayecto olvidarme de tus te quieros.
¿Por qué ya no dices nada? Vivo muriéndome, esperando aquella voz que cada noche me susurraba que me amaba. Sé te olvidó quererme, se te olvidó mi risa y se te olvidó volver a verme. Dime qué hago si vives constantemente en mi mente? Desde que tú no estás no sé ni qué hora es, las luces se me apagan, todo me da vueltas, no me siento bien. Y ahora que ya no estás todo me recuerda a ti y te prometo que voy a reventar si no sales de mí. Fue por quererte de esta manera por lo que hoy me siento tan rota, ya no pienso llorar, ya no pienso escribir un verso de este amor en vano. Adiós, adiós, me despido sin tener explicación, ya lo que diga o lo que haga está de más, se ha apagado el amor. Caminaré alejándome de este dolor, que ha sido el causante de mi desesperación. Caminaré hasta que salga el sol, despidiéndome del que ha sido el gran amor de mi vida.
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