Él es mi niño pero no es mío.
Me coge de la mano para sentirse seguro,
me mira y se sienta encima como si fuera una pared,
sin miedo de nada pues sabe que no lo voy a dejar caer,
se ríe y juega sin preocupación, sólo risas amor puro.
Él es mi niño pero no es mío.
Corretea hasta mi vera,
buscándome con la mirada,
y encuentra su alma abrazada,
con besitos de manzana y pera.
Él es mi niño .pero no es mío.
Chapurrea mi nombre a los vientos,
cuando de mi ser nota la ausencia,
y se le nota la impaciencia,
cuando pregunta por mi vuelta no una vez, si no cientos.
Él es mi niño pero no es mío.
La luz del mar en sus ojos,
la paz del alma en su sonrisa,
de su abrazo nace una dulce brisa,
de su amor flores de colores; amarillo, verde, rojo .
Él es mi niño pero no es mío.
La ternura me desborda estando a su lado,
nos queremos por encima de todo,
estamos juntos, codo con codo,
como las olas en el mar o las flores en el prado.
Él es mi niño pero no es mío.
El aliento de cada día,
me da sin pedir nada a cambio,
y yo gano con el intercambio,
sólo le doy amor y el me regala vida.
Él es mi niño pero no es mío.
Un contrato de cariño nos ha unido,
juntos por el tiempo que nos queda,
nació brillante como una estrella,
y siento como si me hubieran bendecido.
Él es mi niño pero no es mío.
Comentarios
COMENTAR
¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales