Si tuviera poder sobre los vientos, encargaría que una brisa de abril jugara con tu pelo,
pero me conformo con enredar tus rizos en mis dedos al amanecer.
Si tuviera dinero encargaría un rosario de perlas para tu boca,
pero me conformo con perderme en tu sonrisa.
Si pudiera, le pediría a la luna que menguara para hacerte un lecho,
pero me conformo con estrecharte en mis brazos y retenerte junto a mi pecho.
Si pudiera, juntaría un ramillete de estrellas para que iluminara tus sueños,
pero me conformo con mirarte mientras paseas dulcemente por el mundo de Morfeo.
Si pudiera, juntaría las plumas de mil gansos para hacerme una colcha,
pero no sería tan suave como el roce de tu piel contra la mía.
Si pudiera, reuniría a cientos de aves canoras para que me arrullen por la noche,
pero prefiero escuchar salir de tu boca un susurrado te quiero.
Si pudiera, tendría un jardín lleno de rosas y claveles sólo para ver cómo se mueren de envidia cuando pasas a su lado.
Si pudiera, buscaría vida en otros mundos sólo para descubrir que no hay nadie como tú.
Si pudiera, elegiría no haberte conocido y volverte a encontrar y enamorarme de ti cada minuto de mi vida por toda la eternidad.
Si pudiera, buscaría tesoros enterrados por todo el universo sólo para descubrir que no tienen ningún valor al compararlos con una sonrisa, una mirada o el simple roce de tu piel.
Si pudiera haría millones de cosas absurdas para llegar siempre a la misma conclusión,
todo me sobra en esta vida y en la otra si no te tengo a mi lado.
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