Recuerdos de una tarde de primavera

Tendidos en la cama
Ya no les quedaba nada por decir
Ya no había forma de que se amasen más
Y aunque así hubiese sido, no podían hacerlo
Los únicos capaces de obrar eran sus ojos
Que se observaban mutuamente, desde hace años
Algo que solo era interrumpido para que el recorra su cuerpo
Primero con la mirada, luego con la ayuda de su dedo índice
Tímidamente acariciaba el cuerpo de su compañera
No podía entrar en su cabeza que algo tan perfecto fuese suyo
Atrás había quedado cualquier penar que acaezca
Lejos habían quedado las palabras o hechos que su enamorada
Sabiéndolo o no, hicieron que el dudara sobre sus sentimientos
Todo lo que en ese momento importaba, eran ellos dos
Y sus dedos rozando una piel tan suave como algodón
Que recubría un cuerpo con curvas de guitarra
Luego de un tiempo, ella se vistió y despidió
En ese momento, ambos desconocían que sería la última vez
La pareja decidió seguir sus vidas en caminos contrariados
Pero este sendero es muy sinuoso, y tal vez, los obligue a cruzarse otra vez