Denunciar relato
Son tus besos, amor, un fuego ardiente
Que emerge muy dentro de tu alma,
Destapando el aroma del deseo
Encendiendo las brasas de mi calma.
Son tus ojos castaños dos luceros
Que iluminan con su brillo la alborada
Y al tiempo embelesan los sentidos
Hechizando mi razón en tu mirada.
Es tu piel caliente mi vestido
Que aleja el frescor en la mañana,
Pintando un arcoíris en mis sueños
Para hacerlos volar entre tus sábanas.
Fuego, pasión, aroma y brillo
Dádiva de amor, no exiges nada,
Quiero adorar tu nombre entre gemidos
Mientras hundo mi barco en tu ensenada.
Comentarios
COMENTAR
¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales