SIEMPRE SOÑABA A ORILLAS DE UNAS AGUAS CRISTALINAS, CON SUS MANOS INOCENTES ACARICIABA EL MAR.
EL CIELO FUE TESTIGO DE SU GRA DOLOR, CUANDO UNA NOCHE TORMENTOSA ALGUIEN LE ROBÓ EL AMOR. SU ROPA, FLOTABA MAR ADENTRO, SU PIEL, SANGRABA RASGADA POR LA FURIA Y EL DESEO INCONTROLADO DE UN HOMBRE CON ALMA DE ANIMAL.
LA INOCENCIA DE UNA NIÑA SE HABÍA DESVANECIDO BAJO LA LLUVIA, LA NOCHE CALLÓ SUS GRITOS, LAS OLAS DEL MAR LIMPIARON LAS HUELLAS DE AQUEL MAL NACIDO.
UNA MADRE LLORABA DESESPERADA, LA JUSTICIA SEGUÍA SIN HACER NADA, LOS NOTICIEROS RECORDABAN QUE CON ELLA ERAN CUATRO LAS VIOLADAS.
UN PADRE QUE YA NO TENÍA NADA QUE PERDER, PRIMERO FUE SU HIJA Y LUEGO SU MUJER.
RONDABA POR LAS CALLES BORRACHO Y DESALIÑADO, CARGABA SOBRE SUS HOMBROS UN ARMA DE GRAN CALIBRE, CADA NOCHE SE ASOMABA A LAS ORILLAS QUE TANTO HABÍA ACARICIADO SU HIJA, SE COBIJABA ENTRE LOS ARBUSTOS. LA NOCHE LE ENSEÑO A SER UN AVE DE PRESA, UN DEPREDADOR, UN ANIMAL NOCTURNO, UNA FIERA SIN CONTROL.
NADA SE VOLVIÓ A SABER DE AQUEL HOMBRE, NI TAMPOCO DEL VIOLADOR, LA JUSTICIA YA NI RECUERDA LO QUE EN AQUELLA PLAYA PASÓ.
HAY QUIEN DICE QUE DURANTE LAS NOCHES DE TORMENTA LA INOCENCIA DE UNA NIÑA SE PASEA POR LA ARENA, QUE SUS SONRISA SE MANTIENE SOSTENIDA SOBRE LAS OLAS DEL MAR Y EN LA ORILLA MUSITANDO SE OYE UN CANTAR.
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