Fantasia prohibida.

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Aquí estoy otra vez en la universidad, viendo clase de estadística, sin entender absolutamente nada. Las matemáticas jamás han sido mi fuerte y además con este profesor cómo me voy a concentrar.

La manera que sus ojos azules develan su gran concentración, como sus labios llenos se mueven seductoramente, encienden algo en mi que no puedo explicar. Como quisiera que sus manos varoniles me tomaran por mi cintura aquí mismo, que me levantara sobre mi escritorio y que me besara apasionadamente.

Tengo que admitir que esta fantasía me esta prendiendo por dentro puedo sentir que humedezco. Pongo allí en mi sexo. Mi respiración esta mas agitada de lo normal y mis senos se mueven de arriba abajo.

Quiero que este hombre me tome aquí y ahora quiero que me haga sentir mujer que me bese por todo lados que succione cada parte de mi cuerpo, quiero que me penetre una y otra vez, quiero agarrar su pene y meterlo dentro de mi boca, quiero demostrarle lo bien que me hace sentir.

Cuando despierto de mi fantasía me doy cuenta que el salón esta casi vacío.

Me acerco a su escritorio y le entrego las hojas del taller que mando la semana pasada.

Cuando de repente su mano toca la mía y puedo sentir esa electricidad de hace pocos segundos.

Sus ojos me hechizan y su sonrisa me hipnotiza.

"Gracias, Isabel. " Dice sonriendo.

Yo le devuelvo la sonrisa tímidamente, puedo sentir como me estoy sonrojando.

Al llegar a mi apartamento, me meto en la bañera lo mas pronto posible.

Quiero tocarme, quiero sacarme esto de encima, quiero sentir placer.

Poco a poco me quito la ropa, desnudándome, admirando mi cuerpo en el espejo.

Quedo en brasier y panties de encaje, y no puedo evitar introducir mi dedo en mi vagina sintiendo la abrazadora humedad entre mis huellas. Me agarro del tubo de las toallas y pego mi culo a la pared mientras me quedo de pie, así puedo verme toda.

Meto un dedo primero haciendo movimientos circulares en mi clítoris que se encuentra Hinchado y rosado, me encanta verme, me siento como una mujer completa segura de si misma llena de sensualidad.

Se siente tan bien.

A medida que siento que mi corazón late mas fuerte. Mi ritmo allá abajo, aumenta también. Apretando y metiendo mas profundo dos dedos. Me desabrocho el brasier develando mis grandes senos y con esas misma mano acaricio uno de ellos.

Cuando siento que estoy a punto de llegar. Me detengo, y me meto al jacuzzi.

Busco a manguera de presión y la prendo a todo dar.

Mis piernas tiemblan y mi columna se arquea ak sentir mis orgasmos venir uno tras otro haciéndome sentir como una diosa.

Pero no paro ahí, y sigo masajeando mi clítoris con la maguera quiero llegar todas la veces posibles, quiero sentir esa presión en mi vagina que me hace sentir tan bien,.tan femenina.

Esta vez me pongo en cuatro y prendo los chorros traseros, masajeando mi ano y clítoris simultáneamente.

"Ahh dios mio, que ricoo" "ahhh" "ahh"

Las palabras se escapan de mi boca, sabiendo que mi compañera de cuarto esta en casa de su novio.


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