La Exhibicionista

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Lo reconozco tengo un cierto instinto de exhibicionista. Me gusta mostrar mi sexo sin ropa interior en público, Que los hombres y las mujeres me deseen, me miren y fantaseen. Me enloqueceee! .Nunca lo reconoceré abiertamente y menos a mi pareja. Hace tiempo me di cuenta que me gustaba exhibirme de una manera morbosa y que parezca al principio inocente. Que no piensen que soy yo la que realmente manejo el juego y la provocación si no que la visión gozosa es fruto de la casualidad y la postura. Esa especie de control me hace sentir un cierto poder que me estimula todos mis instintos y que no hay nada sexualmente que me excite más.

Cuando esto sucede si es antes de llegar al trabajo me pongo el tanga no por pudor si no por la humedad que se prolonga mucho más de lo normal y además esta excitación solo me la producen los extraños, gente que no vuelva a ver, que por un instante me deseen y me produzcan un orgasmo brutal y silencioso que me haga bajarme en una parada cualquiera para poder salir a coger aire y jadear .Donde no haya ni palabras ni sentimientos solo miradas y morbo. Cuando me subo en el metro o en bus y veo la situación ideal me mojo solo de pensarlo. Tengo debilidad por los padres cuarentones con sus hijos o con sus parejas que tenga que guardar la compostura y por otro lado sé que no hay peligro de que me puedan desear tanto que se pueda crear una situación incómoda.

Sentarme en el asiento de enfrente haciéndome la despistada sin mirar y en cierto modo ignorando a la persona elegida. Sé que me observa con disimulo, una prenda corta siempre es atrayente .Cruzo las piernas despacio de tal manera que dé tiempo a ver algo….. y las vuelvo a cerrar ,toco mi pelo y coloco la melena a un lado sensualmente ,me muerdo los labios , miro el móvil y escribo un mensaje que nunca llegara a su destinatario” Me pones cachonda”¿ Has visto que coño tan bonito? .Las separo lo suficiente para que pueda ver que mi sexo no va cubierto por ninguna prenda y que queda expuesto para que lo pueda disfrutar en silencio. Noto sus movimientos inquietos y el agitar de sus piernas porque su erección comienza. Las vuelvo a cerrar como si no fuera para nada consciente de que él me mira deseándolo y queriendo ver más. Me recuesto en el asiento de tal manera que mi culo quede al borde y así que pueda ver cuando mis piernas se vuelvan a separar como mis pequeños y húmedos labios vaginales se abren. Vuelvo a notar su deseo incomodo lo que hace que el mío aumente y aumente, cuando siento esto lé miro como una gata en celo, normalmente bajan la mirada, pero su instinto cazador y sexual les hace volver a mirar ese coño abierto. Mi mirada se dirige a su polla me encanta notar sus vergas hinchadas y apretadas con las costuras de su pantalón , sus manos tensas que de vez en cuando no pueden resistir la tentación de tocarse y colocarse su miembro para disimular el momento sexual que están sintiendo.

Mi humedad va en aumento con mi excitación, coloco mi bolso encima de mi pelvis rápida y disimuladamente introduzco un dedo en mi vagina un preciado segundo, lo suficiente para que se impregne de mis fluidos y él lo vea por qué observa cada movimiento, lo sé por qué le miro .Le chupo y le mordisqueo de costado intensamente y la punta, Los demás puedan pensar que es un gesto distraído , pero él sabe lo que hago y esto me pone cachondísima vuelvo a abrir el cerrar mis piernas para que se desespere para que las vuelva abrir.

Cuando por sus movimientos o los de sus acompañantes intuyo que llega su parada espero a que se levante sé que cederá el paso a los suyos por habito y por la necesidad de echar el ultimo vistazo de soslayo, Llega mi momento cumbre me sitúo detrás y suspiro para que me sienta y a la vez note cerca el calor de mi aliento por la excitación del momento. Le rozo sutilmente con mi mano la suya, normalmente se paralizan un momento, Cuando se agolpa la gente en la puerta instantes antes de llegar a la parada y todo el mundo va a la suyo y yo a la mío. Cojo su mano y la froto por mi excitado coño un segundo, al sentir que robo ese instante me produce un orgasmo silencioso pero dulce y excitante al máximo, por el riesgo, el morbo.

Cuando se abren las puertas me corro y corro a la vez por vergüenza, pero no puedo resistirme a sentirlo de vez cuando, lo necesito me excita exhibirme como nada. Pienso que será la última vez que lo hago pero a la vez y sin querer espero la siguiente………………


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