Despierta para mi

Como cada mañana suena el despertador y lo primero en despertar en mi, es mi sonrisa. Aún sin despegar mis ojos ya la tengo en mis labios. Me giro y ahí estás tú. 

Aún dormida, con los ojos cerrados, aunque despierta en cuerpo, pero tu alma aún sigue con sus sueños. Mis ojos, no consiguen despegarse de ti. Se clavan en tus labios, sonrosados y dulces y desean como siempre tu despertar, para fundirme en ellos y desearte los buenos días.

Por fin los abres y me lanzo de golpe a ellos. Al mirarme, arrancó tu leve sonrisa, porque aún sigues medio dormida. Mi mano acaricia tu mejilla y tu cara se aprieta contra la palma de mi mano en un esfuerzo de demostrar lo mucho que me quieres.

Te abrazo. Tu me respondes apretandote junto a mi. Sientes el calor que mi cuerpo desprende y dejas que tu cabeza se apoye contra mi pecho. Mis labios susurran tu nombre y un te quiero brota de mi tan profundo, que hacen que de nuevo la sonrisa vuelva a tus labios.

Ya casi deseo que sea mañana de nuevo para verte despertar.