Mi primera vez. ÉL. Parte tres

¿Quién es ÉL?

Aun recuerdo la vez que fui a ver la película Supermán...

Mi hermano menor me trajo de California un librito donde se relataba cómo se había hecho la película...la casa de Supermán, blanca, de un hielo cálido, algo que no había podido imaginarme antes...el hielo puede ser cálido? Me preguntaba...y a mi corta edad, 14 años, decidí estudiar Química para entender si el hielo pudiera ser cálido...y vivir en una casa como la de Supermán...

Cristal...cristales puros como el pensamiento de amor entre dos seres...cuando Supermán llevó a Luisa Lane a su casa de cristal y la hizo suya...él cambió para estar con ella...y ella...se entregó al hombre que amaba...al ser de piedra en su físico, pero cálido en su trato. En la casa de hielo cálido...pureza de amor entre dos seres que se aman...

El piso...con ese mismo hielo cálido en polvo...donde puedes sentir tus pisadas como si estuvieses en las nubes...nubes de amor y sexo...

El...ese es el ÉL, que yo esperaba...agua en forma de hielo, dureza y suavidad....frío y calor...la calidez del espíritu junto con la fortaleza del SER físico...

¿Tiene que ver su físico realmente? No. Pero un ser que se ama a si mismo, se cuida...porque desea vivir mucho tiempo conmigo...en un eterno sueño de sexo espiritual...

ÉL...es fuerte...el es muy sexual....el es Supermán.

El hombre de acero...

Lo conocí...con esa sonrisa cálida de niño...inmediatamente me di cuenta de sus hombros, la estructura muscular tan equilibrada...su color de piel...apiñonada por el sol del pueblo donde nació, un pueblo de pescadores, donde creció y aprendió a amar el mar...

Agua, suavidad, dulzura de amor y sexo...eso, que yo deseaba darle, porque sabía que lo estaba buscando. Agua, caliente y suave de mi sexo virgen...

Cuando nos conocimos, me miraba...nuestros ojos se encontraban en largos periodos, descifrando nuestro ser interior...sus iris, cafés rodeados de unos ojos bellos de tranquilidad y paz que me miran a través del cristal líquido de la excitación de amor...

Puedo sentir cómo su sangre corre por sus venas y su corazón late cuando me ve...

ÉL...me ha estado esperando también...

lágrimas de amor corren por sus ojos cuando nos encontramos...

Él...es virgen...a sus 21 años...

Lloro de amor cuando lo sé...

Seré suya y el mío...

nos casaremos ante Dios.

¿Es necesario un papel?

O más bien hemos decidido entregarnos en amor pleno para hacer realidad nuestros proyectos profesionales y espirituales?

No me lastimes, le dije. Una relación se construye. Las carreras, los compromisos, la forma de vivir, la cultura...sale sobrando cuando hay compromiso de la pareja para vivir en amor de Dios.

No sólo eres bella por fuera, sino por dentro también, me dice.

Tu lo eres igual para mí.

Nos encontramos a la salida del colegio...la gente pasa...miles de vidas...miles de proyectos de vida pasan alrededor de nosotros...pero deseamos que el de nosotros fuera especial...

Nos olemos...nos agradamos...

Me veo en mi interior...con mi vestido de virgen blanca...recuerdo cuando le pedía a Jesús que me mandara a Supermán...

Él...sale del baño...

Con el torso desnudo...una mañana del mes de Enero...frío de invierno...acabo de cumplir 18 años...

Su olor de agua mojada se entremezcla con el aroma de su cuerpo...

alcanzo a ver una promesa...un camino de vello castaño claro alrededor de su ombligo...el se da cuenta de que lo veo...

Me sonríe...

Y me toma de la mano...

Veo la hora: 10 de la mañana...

Las campanas de la iglesia cercana suenan...me voy a casar...

Mi corazón late de emoción...camino a su cuarto como cuando caminas al altar en la iglesia...la marcha nupcial toca...recorro el pasillo que hay entre la sala y su cuarto...lentamente...la puerta se abre...

es Él...lo he encontrado...

Supermán.