Denunciar relato
El mar se mece negro, las olas oscuras y tempestuosas empujan contra la roca herida
y yo, mi yo ingenuo y desvaído, muere
No encuentra el momento, no ha aprendido a nadar. El mar le engulle, le aprieta, le mata
y yo, desde mi ser, mi profundo lirio morado y tullido, me compadezco de mi debilidad y es
entonces, cuando todo se calma, la marea se para, y resurjo en la arena
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