15. Estaban a punto de cerrar pero lo quiso intentar.

Estaban a punto de cerrar pero lo quiso intentar. Levantó un poco el cierre y el chirrío que emitió debió de sonar en todas las casas del barrio. «Vaya», pensó «seguro que ahora ya no querrán atenderme». Al otro lado de la puerta había una chica joven. Tenía una coleta de caballo y estaba sudorosa. Estaba fregando el suelo y vestía un mono azul y una camiseta gris de tirantes. Los tirantes del mono los llevaba caídos y miraba a la puerta con cansancio. -Perdona que te moleste, sé que ya estás cerrando- , dijo Juan Carlos en un tono avergonzado. -Sólo quería preguntar si me venderías un poco de leche para poder dársela al niño esta noche-. La chica del bar resopló y miró hacia el cubo de agua sucia. Se echaba aire sobre el flequillo y asintió arrugando un poco los labios. Un gesto leve pero lleno de cariño. Juan Carlos le quiso dar los ahorros que llevaba, pero ella sólo le cogió la mitad de lo que le ofrecía. - Corre, vete, no vaya a ser que te vean.