LAZOS ROTOS
Parecía mentira como después de tanto tiempo no se habían dado cuenta de su presencia.
Les venía siguiendo, desde el día en que estalló aquella esperada tormenta.
Colgada a sus espaldas, les iba agotando poco a poco las ganas de seguir. El cansancio se iba apoderando de ambos cada año que pasaba. Sus voces sordas ya no eran escuchadas. El frio les invadía cada vez que sus cuerpos trataban de juntarse. Miradas opuestas empezaban a explorar nuevos caminos para escapar de la rutina. Montañas escaladas de puñados de arena sin haber conseguido objetivo alguno. La dejadez había esculpido aquellos rostros envejecidos, tristes y sin ilusión. Mariposas muertas al dejar de oír su canción. Lágrimas guardadas en tarros y risas perdidas en algún rincón.
Colgada a sus espaldas, les iba empujando hacia un precipicio, donde seguir de frente suponía lanzarse al vacío, hacia lo inesperado y mirar atrás, era ver el tiempo robado.
Colgada a sus espaldas, aquella pareja advirtió la presencia de la crisis, quién con ayuda de un amor roto, consiguió romper los lazos que les mantenían juntos pero a la vez infelices.
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