No digas más.

No digas más, ya sé lo que eres.

No sólo siento desprecio y asco por ti, sino también una gran lástima. Y bueno, quizás también sienta un poco de lástima por mí, por ser tan ingenua.
Te idealicé como el chico perfecto, te veía tan lindo…Sin defecto alguno. Pensé que sería el único, pensé que a lo mejor podríamos lograr algo lindo juntos…Pero no.

Creo que en algún momento, me tuviste hechizada, ciega; porque la verdad no puedo creer que la gente me haya abierto los ojos, no puedo creer que no me di cuenta por mí misma.
No puedo creer que hayas querido aprovecharte de mi amor sincero, me cuesta trabajo creer que seas el mismo chico del que me enamoré. Estoy decepcionada, más de lo que nunca sabrás.

No digas más, ya lo entendí.