Nuestro final

Perdona si te he podido confundir una vez, pero eso es lo que me has hecho tú durante tres años. Decías que no me querías, pero luego tus palabras y sobre todo tus actos parecían desmentirlo. He soñado contigo más de 500 noches y desde nuestro último beso he podido encontrar la claridad que necesitaba. Un último no que bese con la esperanza de poder transformar, aunque lo único que cambié fueron mis sentimientos por ti. Estos años he estado ahí para ti y quizás no hayas sabido verlo, ya me he cansado mucho de una caída tras otra. Alguien me ha ayudado a olvidarte y ahora me reprochas nuestra última noche, sí, él estuvo ahí siempre, pero tú eras más importante y aquella noche era tu última oportunidad y mi último intento. Ahora surgen palabras en ti que me tachan de interesada y de aquella que busca calor en cualquier cuerpo, pero lo que no sabes es que solo ha habido un hombre en mi vida que me ha tomado y es él, porque tú nunca llegaste a culminar un deseo frío por tu parte y una ilusión de amor por la mía. Hice lo que hice porque creía que cambiarías, pero el tiempo y tus bazas han hecho que me olvide de ti. No vengas a pedirme cuentas y a decirme que él se irá tarde o temprano, porque tú nunca has estado.