Mi cuerpo, se está despertando, siento vibrar toda mis fibras, comienza una nueva etapa de mi existencia, creando para el mundo todo lo necesario.
Cada temporada, me cuesta más desperezarme, me siento cansada, exprimida, casi extinguida, seca,moribunda.
Enseñé al mundo, a cuidarme, atenderme, abrazarme, para así poder yo también amarles y cuidarles, ofreciéndoles toda la gama de mi existencia, mi vida y sus frutos a sus pies, para el disfrute y supervivencia.
También vieron y padecieron terriblemente, las consecuencias de mis enfermedades, mis carencias, y los malos tratos a los que estoy sometida.
Inundaciones, sequías, terremotos, incendios, enfermedades.....
Son muchas las ocasiones que he dado para que se actúe en consonancia y cuidado para poder convivir.
El tiempo pasa inevitablemente, me siento muy enferma, mis frutos serán escasos, los árboles dejarán de dar sombra, las flores desaparecerán, la hierba no crecerá, los animales se extinguirán...
La vida, desaparecerá.
Es mi grito desesperado, mi cuerpo se prepara para la hermosa primavera, brillante, llena de vida, creando hermosas flores, los mejores manjares, valiosos alimentos de la tierra, dejando fluir el agua en preciosas cascadas.
Os doy vida, alimento, belleza, luz y color.
-No lo despreciemos, o perderemos lo más valioso que tenemos.
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