La noche era lluviosa. Caminaba por la calle con la chaqueta bien abrochada y andando con dificultad por el fuerte viento que soplaba. La tranquila música se escuchaba desde la puerta de la taberna. Entró y observó el ambiente. No era un bar de barrio. Era un agradable lugar donde relajarse y pasar un buen rato. Nada de sonidos de máquinas tragaperras ni nada de eso. Al fondo,un hombre pintaba a una mujer en su blanco lienzo,inspirándose en la musa que se hallaba delante de él. Otro hombre,con su máquina de escribir contemplaba el entorno buscando inspiración para seguir escribiendo su historia. Una mujer se encontraba sobre un escenario muy pequeño cantando sentada en un taburete y con un ensayado pianista a sus espaldas. Otra mujer al otro lado,ensayaba su papel para una obra de teatro. Se le veía disfrutar de su trabajo. Le ponía empeño y pasión. Seguramente,esa mujer actuaría perfectamente delante de todo su público y la aplaudirían durante minutos. Seguramente toda esa gente triunfaría en su campo. Los retos se consiguen con empeño y decisión. Si esas personas no llegaran a lo alto,se deprimirían pero no se undirían y dejarían de hacer lo que tanto les gusta,porque si te gusta hacer algo,da igual si no consigues hacerlo grande. Solamente mirarían atrás y contemplarían lo mucho que disfrutaron haciéndolo.
Retos© J.R.Aguilera
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