Denunciar relato
Soy una hormiga. Mi vida es monótona y laboriosa. Nunca he sido nada especial dentro del mundo de las hormigas ni fuera de él. Pero ayer me encontré con Dios… Me puse un poco nerviosa, pero no creo que se me deba censurar por eso, pienso que a cualquier otra hormiga le habría sucedido lo mismo. Pero, luego, con la charla, fui relajándome. Finalmente, hemos quedado para otro día. Dios es un gran tipo, aunque eso sí, con unas ideas muy peculiares sobre la existencia…
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