La joven 'despromesa'

Él sólo era la joven pieza quebrada. Vago, descocado y con la mente demasiado abierta. Una pieza negra en una puzle blanco. Familia tradicional, padre financiando la casa por la mañana y descansando por la tarde, madre ama de casa, única responsable del hogar, hija formal y elegante, estudiante de la más prestigiosa facultad de derecho del país. Y, después, yo, hijo con planes al nacer que se deshicieron con el reloj de cuco del antiguo salón. Joven ambicioso con un objetivo impensable en el lugar del orden: vivir, y, sobre todo, vivir feliz, libre y ansioso por seguir viviendo. Pero, eso es pan para hoy y hambre para mañana, de felicidad no se vive, con tus tonterías no podrás mantener una familia, tú lo que quieres es ser un vago, qué pensará el resto de ti. Y es que claro, como iba a encajar en su mundo, si nuestros deseos se contraponían. Ellos querían encajar, yo sólo disfrutar.