Tengo de las mujeres de mi tierra
el mutismo que causa el descontento
tengo también el sentimiento
más noble y más profundo
que pueda sentir el corazón humano.
Tengo de las mujeres de mi tiierra
ya olvidada,perdida en la montaña
el orgullo,la bravura,la mirada
que corta el aire y hace temblar la piedra.
Tengo de ellas,las de mis antepasados
el paso firme y la quietud intocable de sus años.
el regazo tibio y el pecho presto,para el alimento.
Yo tengo,sí...espinas en el lecho
y un camino de piedras por delante
pero yo sé que ellas...ellas también lo tuvieron.
Tengo de áquella,la Anayansy
la herencia del cabello,el color de la piel , su sonrisa
y el frescor del campo en la mirada.
Tengo de las mujeres de mi tierra
de aquella tierra virgen profanada
el dolor y la angustia desatadas
aquí en mi corazón por el pasado.
Tengo la herencia más pura
la herencia más sublime
la que con lágrimas redime
a bravos guerreros olvidados.
Tengo el amor ...
el amor por todo lo que es mío
por mi gente,por mi sangre indígena,
mis verdes campos y mis claros ríos.
Tengo de las mujeres de mi tierra
la auténtica...la de pie de descalzo
la que lleva el cabello desmayado sobre sus hombros
y un arcoiris cubriendo su hermosura
la sonrisa perdido en la llanura
y el dolor de un pueblo marginado.
Y como a ellas,me separa del mundo...
del falso mundo,un abismo de vanas aparienciaas.
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