Tal vez sea mi percepción, o es que las cosas son realmente así. Pienso que hay dos tipos de personas, las que tienen sensibilidad y ven más allá de las cosas y las personas; y las que se quedan en la superficie. Las segundas, no saben realmente cuánto se están perdiendo de la vida.
El matiz de una voz, las sensaciones que transmite una canción, la magia que puedes descubrir en los ojos de una persona, la emoción que puede causar ver un paisaje especial o adentrarte en una historia… producen emociones indescriptibles que no somos capaces de explicar, pero que no queremos que nos dejen nunca. Como por ejemplo, un escalofrío. ¿Cómo se explica un escalofrío? Aquel que recorre tu cuerpo cuando te paralizas por la belleza que te rodea, cuando sientes que aquello que está ante ti, es algo realmente especial, cuando en algún momento llegas a pensar que nadie podrá entender jamás lo que sientes, porque es demasiado complicado como para que lo entiendan.
M. Sanz
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