EL MAL PADRE Y LA MADAM (Obra de teatro)

INT. – NOCHE – BURDEL

PADRE – Traigo a mi hijo para ver si me lo avispan un poco.

MADAM – ¿Avispar?

PADRE – Bueno, sí, ya sabe, que lo despierten, que le enseñan un poco de la vida.

MADAM – No creo que entienda usted bien lo que hacemos acá.

PADRE – Quiero que le saquen lo boludo, ¿me entiende?

MADAM – … Si, pero para futuras referencias, sería mucho mejor que cuando hable sea más directo y use menos metáforas, lo cual es obvio que no son su fuerte.

 PADRE – Ok, no hay problema.

MADAM – Usted lo que quiere es una chica para su hijo.

PADRE – Exactamente.

MADAM – Bien, nos vamos entiendo, y esta sería la primera vez para él, ¿verdad?

PADRE – La primera vez que mojaría, sí.

MADAM - … Por favor, las metáforas, gracias, ok, déjeme llamar a una de las chicas.

PADRE – Ok, ¿tiene chinas?

MADAM – … ¿Perdón?

PADRE – Nada, no importa, solo consígale alguien que este buena, y tal vez con algo de paciencia, y no muchas expectativas.

MADAM – No se preocupe, yo me encargo. (Apoya gentilmente la mano sobre la espalda del hijo y lo lleva hasta una habitación en el fondo, donde entran los dos, unos momentos después sale solo la madam) En cuanto al dinero…

PADRE – A, si, por supuesto, ¿Cuánto seria?

MADAM – Para este caso en particular, serian 1000.

PADRE – ¡¿1000?! Yo solo quiero que lo aviven un poquito, no que se casen con él.

MADAM – Creo que considerando toda la situación, el precio es más que correcto.

PADRE – Igual me parece medio excesivo, pero bueno, todo sea para que se avispe un poco y deje de ser tan boludo.

MADAM – (Tomando el dinero de la mano de él y con una sonrisa algo falsa en su rostro) Seguro, puedo ofrecerle algo para tomar mientras espera.

PADRE – ¿También me van a cobrar la bebida?

MADAM – No se preocupe, está incluida en el precio final.

PADRE – Bueno, de esa forma un whisky estaría bien.

MADAM – Excelente, en un segundo se lo traen.

(La madam se aleja)

(Después de un rato vuelve a aparecer la madam con el hijo a su lado, el padre ahora se encuentra sentado en un gran sillón del lugar)

MADAM – Acá le traigo a un hombre.

PADRE – Mira quien esta acá (El padre se levanta del sillón) ¿Y cómo fue todo?

MADAM – Todo fue de maravilla.

PADRE – Muy bien, muy bien… (Observa en silencio unos segundos a su hijo y después mira a la madam) Sigue con cara de boludo.

MADAM – Señor, acá se coge, no se hacen milagros.