"Más allá de las estrellas" Parte 09 de 09.

acercaba a algo, pero no sabía que era. Estaba nervioso, tanto que parecía que arrancaría las rodillas con los dedos.

Con el olor del viento en la nariz la velocidad iba aumentando, algo me decía que nos estrellaríamos, que moriría, pero no me importaba, estaba seguro de mí mismo.

Sentía la fuerza del motor que parecía que estaba a punto de explotar… “Estamos cerca, Zael” -gritó Cantil-… No sé pero tenía muchas ganas de llorar, pero tenía los ojos cerrados y nada podría abrirlos… “¡USA TUS MANOS! ¡CUÍDATE!”… Esas fueron las últimas palabras que escuché de Cantil, cuando de pronto sentí que fui arrojado del helicóptero y di muchas marometas en el aire, parecía … Sentí como el viento chocaba contra mí… ¡Iba en picada contra la tierra!

La fuerza de mi caída me obligó a abrir los ojos… Sólo veía como me dirigía hacia el piso… Estaba sintiendo mi muerte o más de diez huesos rotos, ni si quiera tuve tiempo de gritar cuando ya sentía la tierra estampada en mi cara… A pocos segundos de mi trágica y peligrosa caída sentí que bajaba en “cámara lenta”, sentí como mi cabello rizado se movía como si estuviera en el agua, igual mi sudadera y mi pantalón, me fijé que estaba cayendo en el barranco donde me bajé, pocos metros antes de caer recordé las palabras de Cantil y puse mis manos al frente para amortiguar mi caída, al hacerlo, la velocidad de mi caída aumentó como antes y me estampé en la tierra sólo a unos cuantos centímetros de ella.

El golpe dolió en las rodillas, en las palmas de mis manos y comí tierra.

Pero mi cabeza y mis “partes nobles” estaban a salvo, sin ningún golpe ni rasguño.

Me levanté poco a poco, de igual manera abrí mis ojos empolvados y vi que estaba en el mismo lugar, en aquel barranco.

Estaba mi auto azul, las luces de la ciudad, pero ya no había estrellas, o bueno, las que habían bajado no estaban, sólo las del cielo, pero estaban a kilómetros y kilómetros de aquí, cuando vi el cielo vi claramente una bandada de golondrinas doradas que se alejaba muy rápido. Fue emocionante y fascinante.

Respiré y me calmé, de inmediato vi mi reloj, tal vez ya era muy tarde u otro día, pero me llevé una gran sorpresa, eran solamente las 11:12 p.m. es decir… ¡TODO FUE EN UN MINUTO!

No me lo podía creer, un paseo tan único e inolvidable en tan sólo un minuto, pero… No en cualquier minuto… Fue a las 11:11 p.m. ¿Casualidad?

Parece que alguien en el cielo escuchó mi deseo, ya sé quién está allá arriba, de qué está hecha la Luna, qué conforma el cielo. Hablé con un pez, una sirena y un cocodrilo… ¡Todo en un minuto!

Todavía no me la creo, es algo que… Como me dijo aquella voz… No le pasa a cualquiera.

Luego de estar de pie y darme cuenta que todo había pasado tan rápido, me subí a mi auto y me fui a dormir. En el trayecto encendí la radio y salió a flote una canción que jamás había escuchado, empezaba con piano y luego le seguían los metales, percusiones y el bajo. La letra era muy linda, hablaba sobre que… Cuando encuentras a la persona indicada y sabes que es alguien que sabe decir “Por favor”, “Con permiso”, “Buenos días”… Que sabe pedirte perdón cuando hace tonterías… Que sabe callar cuando en silencio escucha al mundo y… Si sabe ganar y perder… Que simplemente… ¡¿Qué más puedes pedir?!  Algunas personas no lo ven así pero todo eso son señales… De que esa persona es la indicada, de que no deben dejar las cosas a tiempo y tienen que aprovechar las oportunidades.

Llegué a mi casa y lo primero que hice fue ir al baño, luego me cambié de ropa y fui a la cama… La verdad ese día no pude dormir temprano, me dormí como a las 4:00 a.m. pensando y pensando… Lo bueno que el día siguiente era domingo, no hubo tanto problema.

Ahora sí que… El amor me quitó el sueño.

Y bueno, hablando de eso, quiero decirte algo.

Aquella voz me dijo que hiciera todo lo posible por recordar lo que pasó esa noche, que lo escribiera y describiera. Y aquí estoy, sentado recordando cada minuto de esa hermosa y emocionante aventura.

Me dijo que cuando terminara de escribirla, se la regalara a alguien muy especial… Al amor de mi vida, a la persona que él me dijo que llegaría conmigo, y… Veo que esa persona existe. Está leyendo esto, con sus lindos ojos de izquierda a derecha.

Esto que me pasó me ha hecho ver muchas realidades, me ha hecho creer en mí mismo. La magia llegó a mí. Y quiero compartirla contigo.

También, me dijo que no me olvidara del obsequio de Guigno, aquel caballito de mar, que de hecho, es el mismo que tuviste en las manos antes de leer esto, al igual que la rosa… No sé si recuerdes la primera rosa que te di… No es una rosa cualquiera… Es la que me traje de la Luna.

Y ese caballito viene desde el cielo, igual que yo.

Contigo me di cuenta de que el amor verdadero existe, la voz tenía razón. Llegaste.

Lo nuestro empezó apenas hace seis meses, y esto que te conté me pasó hace ocho. Quería contarte ésta historia cuando el momento preciso llegara, igual que como llegaste tú.

Esto que tenemos y que hemos hecho juntos es muy valioso y único, no habrá otro igual.

No miento cuando te digo que lo nuestro es único y jamás habrá otro igual

Me veo en un futuro a tu lado, y veo que las coincidencias encajaron muy bien.

Apareciste en mis sueños dos veces antes de conocerte… Ahora te veo y sólo llega a mi mente un pensamiento… Te Amo… Más allá de las estrellas.

Te encontré.

 Gracias, Aram.

FIN.

[PD]

Muchas Gracias, lector.

Es todo un placer saber que llegaste hasta aquí. Para mí es todo un logro el saber que alguien leyó mis palabras. Muchas Gracias, en verdad.

Si te gustó ésta historia y mi manera de escribir, te invito a pasar a mi Blog, donde encontrarás más escritos de mi autoría. 

Muchas Gracias de nuevo. Un abrazo fuerte hasta allá de parte de Leonardo Saldívar M.

Te agradecería que me comunicaras lo que pensaste sobre mi historia. La opinión de la gente para mí es de gran importancia. Éste es mi Twitter: @SaldivarSon. 

¡Gracias!

Link de mi Blog:http://etceterasm.blogspot.mx/