Denunciar relato
Aún persivo el sutil vacío
de tu ausencia
pero, no con tristeza;
tal vez con leves trazos de sosiego
en aparente despertar florido.
Tú ausencia, presencia etérea
en una montaña de recuerdos vivos.
Lloro, suspiro y rio
en reconciliación divina
del cual vibro de esperanza
cicatrizando mi alma herida.
Luego con discretas lágrimas
limpio mis ojos como dos niños
que se bañan en un río tranquilo.
Elevando mi alma hacia el infinito
en espera consciente del luminoso
reencuentro de aquel que se ha marchado
y revive en mis pensamientos.
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