AL DÍA SIGUIENTE (Basado en hechos reales)

Aquella mañana al asomar sus ojos al mundo comprendió muchas de las cosas que olvidamos por vivir demasiado acelerados...

Todavía no se habían cumplido 24h. De aquel fatal accidente que dejó su vehiculo para la chatarra, cuando ella despertaba sana y salva al lado de su marido.

Lo miró, él aún dormía, se incorporo y le dio un beso, respiraba tranquila entonces, sabedora de que su ángel de la guarda había estado con ellos en todo momento aquel día.

Su postura en la cama regresó a la posición que tenía cuando aún dormía y recordó su sueño de aquella noche.

Quizás condicionada por el shock sufrido aquel descanso después del accidente la había llegado a tener el peor de los sueños, mas bien fue una terrible pesadilla, la que intentaba olvidar sin poder...

La poca velocidad del auto le permitía ir charlando apaciblemente con su marido, y escuchar aquella música que no sabía el porque la disfrutaba más que nunca. Cuando sin saber como, pues aún no se explicaba lo que había ocurrido para que tuviesen aquel fatal accidente, un giro brusco del volante provoco que diesen varias vueltas de campana por el arcén mojado debido a la lluvia.

En el sueño lo veía a él inmóvil y ella a pesar de que contemplaba la escena también había perecido en el siniestro accidente.

Abrió los ojos de golpe y se abrazo a su marido, sentía mucho miedo se repetía que la vida les había dado una segunda oportunidad y que no tenía duda de que las alas de su ángel de la guarda les había protegido de una muerte segura, igual como había estado soñando.

Un respiro profundo la calmaba, rezando aquella oración que le enseñaron para dar gracias a Dios siempre que era necesario.

Ahora se preguntaba qué si era necesario rezarla y se respondía simultáneamente, sin que nadie la escuchase en ese momento.

Una sensación de que tenía muchas cosas olvidadas y a las que antes no prestaba toda la atención pertinente, la obligaron a levantarse. Estaba viva y tenía que reaccionar, cuando te ofrecen una oportunidad así, no hay que desperdiciarla, proponiéndose que de ahora en adelante disfrutaría sin prisa de todo lo que te brinda la vida y que daría gracias por haber salido ilesa ella y su marido de aquel trágico accidente. Sin duda la enseño a sentir, a no olvidar y a recordar todo lo que tenemos y que podemos perder en un segundo.

©Adelina GN