La humanidad...

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Y así era ella: Una chica normal con una vida rodeada de religión, espiritualidad y tradición.

Y así fue como murió...

Esta chica ya tenía la edad perfecta para ser una joven casadera y su padre decidió un buen marido para ella. La boda fue tradicional y llevadera. Sin embargo, esa noche de bodas fue como probar el infierno.

Un día, la chica se cruzó con una persona mientras compraba algo de comida en el mercado. Aquella persona era totalmente diferente a ella. Vestía con ropas extrañas y sus rasgos eran propios de un extranjero descarriado. Aquella persona la miró a los ojos tan fijamente que ella tuvo que bajar la mirada para evitar problemas.

Pasaron los días y cada vez que ella iba al mercado él estaba en el mismo lugar y la miraba, hasta que uno de esos días él se acercó a ella y le preguntó su nombre. A partir de ese momento, hablaron cada vez más y se conocieron. Hasta que ella se encontró en una encrucijada. ¿Acaso sentía amor por ese extranjero? ¿Acaso no es eso un mal presagio?

Después de pensarlo mucho, tomó una decisión. Decidió que aquel extraño podría darle algo de lo que significaba amor. Esa misma noche habían quedado para hablar sobre su relación.

Cuando ella esperaba en el lugar acordado, vio a lo lejos algo que brillaba y centelleaba. Intentaba identificar qué era hasta que descubrió lo que significaba todo aquello.

Aquella noche su cuerpo fue calcinado mientras sus gritos se consumían con las llamas. Aquella noche su marido y su amado extranjero la acusaron de engaño y de no adorar la religión musulmana.

Ahora su cuerpo está perdido en el viento y en los lamentos de los muerto. Y yo ahora me pregunto ¿era necesario? ¿Por qué pensamos antes en las reglas de una religión que en las personas? ¿Acaso nos podemos considerar humanos? Yo creo que hablamos de humanidad sin saber lo que significa esa palabra. Hablamos de lo que está bien y lo que está mal sin ser conscientes de que no hay una verdad única. El mundo cambia, al igual que la verdad. ¿Por qué entonces seguimos aferrándonos a una idea de libertad impuesta? ¿No es que la libertad es todo lo que hacemos hasta que no influyamos en la libertad de los demás? Tolerancia, respeto, amor, reflexión... aún queda mucho por hacer para llegar a poder llamarnos humanidad, pero eso solo depende de cada uno de nosotros el llegar al nivel de persona humana.


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