Peluquería

Cuatro meses que llevo con las monjas y mis hijos han decidido que tenía que ir todas las semanas a la pelu. Se ve que andaban mejor de dinero y les preocupaba mi aspecto físico. Así que a partir de hoy, me llevan con la peluquera, me peina, en plan moderno y luzco aspecto “presentable”. Se ve que antes no lo tenía y pasaban vergüenza, al pasearme por la “Resi”.

Yo, de paso, pasaba la mañana y se me hacía más entretenida la mañana.

Ellos se vanagloriaban, en público, de que atendían a su madre, o sea a mí, y yo asentía y les daba las gracias. Sabía que era su obligación, como hijos, que se gastasen su dinero o el mío, no sé muy bien de que cuenta salía, el caso es que soltasen, “los posibles” que años atrás no lo hicieron…….