Denunciar relato
Incontables veces soñé con irme lejos, con empezar a correr y no detenerme hasta no poder reconocer ni mi propio rostro, con dejar atrás todo lo que me clavo estacas en el pecho y simplemente alejarme de la agonía, pero nunca imagine que el problema de mi desequilibrio no provenía del lugar en el que estaba o de la gente que rondaba como cuervos mi cuerpo, el problema era yo, siempre fui yo.
Comentarios
COMENTAR
¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales