Primer polvo I parte

Por
Enviado el , clasificado en Adultos / eróticos
13612 visitas

Marcar como relato favorito

Durante mi juventud anduve con una persona la cual quise mucho inclusive llegue amarla, quizás por miedo o más bien por tonta fue poco lo que demostré. Esta persona despertó en mi deseo, cariño y muchas cosas más que uno desconoce a los 15 años, nunca había estado con un hombre pero al verlo o estar cerca de él sentía muchas sensaciones prohibidas en su momento y ganas de comerme el mundo agarrada de su mano, éramos jóvenes y en ese tiempo el tocarse, besarse, agarrarse de manos era casi un pecado pero para mí era lo más cercano a una experiencia sexual. Creo que gracias a él soy lo que soy en la parte sexual. Duramos mucho tiempo tocándonos, deseándonos pero lo más lejos que llegamos fue hacernos sexo oral y vaya reconozco que su verga… wow era deliciosa y de buen tamaño.

Pasado más de 10 años mi relación con Dick el que fue mi amor de juventud, no se en que momento comenzamos a profundizar más y más en nuestras conversaciones y sin quererlo comenzamos a sentirnos como si tuviéramos nuevamente 15 años, los dos teníamos pareja pero fue algo que estaba a la espera por nosotros.

Regrese a mi ciudad de origen a un evento. Ya había hablado con él que iba y que sería bueno que nos viéramos sin pretender que algo pasara.

Llegue a aproximadamente a la hora acordada, al verlo me dio mucha alegría, nos saludamos de beso en la boca creo, después de charlar un rato de temas generales nos propusimos a quedarnos toda la noche juntos, llegamos al hotel nos tomamos unos tragos, reímos, fue divertido la verdad y me gusto, ya entrado en detalles yo estaba con el libido alto y Dick con su torso al desnudo para ponerse más cómodo.

 

Todo comenzó con un buen masaje yo se lo propuse por el cansancio acumulado que tenía, así que me quite la ropa con algo de pena, él por su parte relajado, busco algo de crema que yo tenía entre mis cosas, yo me puse de espalda totalmente desnuda, él me puso sus grades manos en mi cuello, luego en la espalda y no puedo negar que lo hacía muy bien, mientras mi mente se imaginaba que tal seria en la intimidad, será que su verga sigue siendo lo mismo, sus besos, su tacto, fueron tantos los pensamientos que pasaron por mi mente y a la vez estaba muy excitada por estar a solas con él y con la incertidumbre de que podría pasar, me di vuelta y ahí estaba Dick con su gran verga que se quería salir de su ropa interior, se veía bastante abultado demasiado diría y yo excitada, le pregunte si estaría dispuesto a pasarla mejor y con voz suave me dijo que si, así que lleve mi mano a su miembro y que dura tenía esa verga y aparte era gruesa, le pedí que se quitara todo para mí y lo hizo, al regresar nuevamente a mi siguió con sus masajes pero esta vez se dirigió a mis senos los presiono un poco y toco mis duros pezones fue una sensación deliciosa.

 

Ese momento por el que había esperado tanto tiempo llego, después de pasarme sus grades manos por todo mi cuerpo llego ese momento que los dos deseábamos y fue así, su verga grande, gruesa y goteando de tanto placer, la fue metiendo poco a poco y sentir como mi vagina se abría ocasionándome un leve ardor, y así fue cogimos hasta enloquecer los dos de placer y más me enloquecía el sentir sus dedos jugar con mi clítoris, lo halaba y lo apretaba , mientras yo no dejaba de jadear por todo ese placer que me estaba dando.

Continuara...


¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed