Mero Recuerdo Extraviado.
Por Cabeza Perdida
Enviado el 18/07/2017, clasificado en Reflexiones
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I
Que loco eso de cruzarse de casualidad,
Porque al fin y al cabo… ¿No era que no existía la casualidad?
Entonces el encuentro adquiere otro matiz,
Ya no de casualidad,
Ni de azar,
Ni de coincidencia,
Ni Desmotivado,
Se vuelve causal.
II
Y sin embargo ambos pisan la misma baldosa,
Marcada para ambos,
Vaticinada solo en la ignorancia de ese momento: Pactado encuentro insospechado.
Y allí se aparecen,
La pisada de ambos,
Compartiendo el mismo espacio,
El mismo aire…
Y cruzan sus miradas,
Pues ninguno lo esperaba,
Ninguno lo sabía,
Ninguno lo recordaba al otro realmente,
Y sin embargo ambos pisan la misma baldosa,
Y sin embargo ambos cruzan sus miradas,
Y sin embargo ninguno lo sabía.
III
Él la encuentra atractiva,
Ella lo mira con curiosidad,
Pero algo difiere, y es que él ha quedado prendado en el fugaz halo del azul de sus ojos.
No es amor,
No es pasión,
No es nostalgia,
Pero se parece…pues su anclaje no es físico, ni sexual,
Es memorioso y temporal.
Ella prosigue con su marcha, despreocupada, desligada,
Olvidada,
Obviamente los días le han podido más en su cabeza que la misma imagen vivaz de lo que compartieron.
IV
Él frena en seco.
Ya no la ve,
Le da la espalda,
Ambos,
El uno al otro,
Sin embargo ese rostro no se desvanece,
Queda como una fotografía sobre sus retinas y no se emborrona:
Aquel pelo alicaído,
Aquel cobalto de su mirada,
Aquella boca,
Aquella cintura,
Aquella estilizada figura,
Aquel rostro particular…
Que extraño personaje, tan conocido y ajeno a la vez,
Como mutado,
Modificado,
Moldeado,
En su mente aquella imagen fugaz callejera no termina de encajar a la perfección con ninguna de sus memorias,
Y sin embargo le resulta familiar,
Cercana,
¿Amiga?
No, algo más…
V
Y aunque se siente como que han pasado horas,
Y ella cada vez se aleja más,
Y cada vez más centímetros los vuelven a convertir en ajenos,
Tan solo pasan unos pocos segundos hasta que alza la cabeza.
Mira primero al horizonte, allí donde termina la calle y violentamente es atravesada por otra,
Y se da cuenta de que la conoce,
Que efectivamente significó algo para él en la vida,
Más que algo,
Pues compartieron más tiempo juntos del que hoy ambos recuerdan,
Se dijeron más palabras de las que pueden abarcar hoy sus lenguas
Y varios besos deshilachados sellaron los silencios que ninguno sabía cómo llenar…
VI
“3 meses”, recuerda…
“3 meses juntos,
3 meses de tiempo,
3 meses de nuestras vidas,
3 meses de vida donde nos reservamos pequeños huecos donde convivir juntos unas horas…
3 meses era mucho,
3 meses nos habían vinculado,
3 meses y varios besos desnutridos nos habían hecho más que conocidos,
3 meses nos habían hecho casi compañeros de andanzas…
VII
Y sin embargo aquí estamos,
Años después,
Cada uno desde un lugar diferente,
Cada uno con un fin distinto,
Cada uno con caminos descoordinados,
Cada uno, uno mismo
Pero aquí nos cruzamos,
Pisando la misma baldosa,
En zonas inconcebibles,
En momentos descalificados,
Sin razones aparentes,
Y sin nada más que un recuerdo extraviado en la mente…
VIII
Y sin embargo, ninguno atrapa el recuerdo a tiempo,
Y los metros apremian,
Las horas corren,
Los minutos carcomen,
Y finalmente, cada uno sigue su camino,
Nada ha pasado,
Volvemos a ser dos extraños...
...Extrañamente...
Pues somos dos extraños que invirtieron parte de su vida por el otro,
Años atrás,
En juventudes pasadas
Y henos aquí,
Sin reconocernos,
Ajenos,
Desvinculados,
Tal y como si nada hubiese acontecido,
Y sin nada más que un recuerdo extraviado en la mente…”
XI
Él se frena,
Abre los ojos en revelación,
Gira sobre sí mismo y la observa alejarse,
Paso a paso,
Distancia a distancia.
Efectivamente, el recuerdo encalló sobre su memoria,
Y se queda expectante,
Observando su andar desinteresado e ignorante,
Esperando a ver si aquella imagen vivaz empolvada en su mente revivía al unísono en ella también,
Pero los segundos pasan,
Y ella prosigue su marcha,
Desinteresada,
Ignorante,
Desvinculada,
Extraña,
Hasta que desaparece por una esquina.
X
Y ahí queda él,
Pensando en que varios años después,
Pisaron la misma baldosa,
Cada uno desde un lugar diferente,
Cada uno con un fin distinto,
Cada uno con caminos descoordinados,
Cada uno sin atrapar el recuerdo a tiempo,
Cada uno siguiendo su senda,
Cada uno, uno mismo,
Volviendo a ser dos extraños,
Sin reconocerse,
Ajenos,
Desvinculados,
Tal y como si nada hubiese acontecido,
Y sin nada más que un recuerdo extraviado en la mente.
cabezaperdidaenunmar.blogspot.com.ar
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