¿Vendrá?

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Enviado el , clasificado en Terror / miedo
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¿Es el miedo una respuesta?

 

El padre miró a su hijo mayor y sentenció:

 

- Lo siento. Pero si no te llevas a tu hermano no te dejo el coche.

 

- ¡Pero, papa! Me voy con mis amigos y es de noche. ¿Dónde puedo ir con un crío de doce años?

 

David, el hijo menor, sonrió por su éxito. Sabía muy bien que con sus gritos y rabietas conseguía todo lo que quería. Miró desafiador a su hermano. El muchacho sacudió la cabeza dando un portazo al salir. A los pocos segundos se escuchó el arrancar de un coche y un acelerón que enmudeció en la distancia.

 

- ¡Papá! – Gritó David con los ojos desorbitados.- ¡No te ha hecho caso! ¡Se ha ido con el coche y sin mí!

 

-No te preocupes. –Resopló el padre- En cuanto vuelva se va ha enterar.

 

- ¡Prométemelo! ¡Prométeme que le reñirás y que no le volverás a dejar el coche!

 

- Si, te lo prometo.

 

Ahora, David se sentía satisfecho y feliz. Marchó a la cama intentando no dormirse para escuchar a su padre reprendiendo a su hermano. Para él era parte de la recompensa. Pero el sueño le venció.

 

Ya muy entrada la noche, unos golpes bajo el colchón lo despertaron. Estuvo apunto de gritar. Pero la voz de su hermano lo tranquilizó:

 

- No te asustes David. Me he escondido bajo la cama para que no me vea papá. Siento haberte dejado en casa. Ya sé que te hacia ilusión salir por la noche... Te prometo que mañana, al anochecer, vendré y te llevaré con migo.

 

- ¡Vale! Pero no pienses que por eso te vas a librar de la bronca. –Se regocijó. 

 

- No te preocupes por eso. –Rió- De todas formas mañana te llevaré con migo. Duérmete.

 

- Más te vale que cumplas... Si no ya sabes lo que te espera.

 

Y se durmió saboreando la dulce victoria a expensas de la humillación ajena.

 

A la mañana se despertó corriendo al comedor. Allí encontró a su padre llorando descompuesto.

 

- Hijo mío... Anoche, a los pocos minutos de salir tu hermano de casa, tuvo un accidente y murió... No lo volveremos a ver nunca... Marchó demasiado nervioso.

 

Más bien es una pregunta.

 

 

 

   Jesús Cano


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