Sursuncorda en aparcería

SURSUNCORDA EN APARCERÍA

Antes que muera la petición postrera,
y rubicundos los despojos triunfantes,
discurre afrentosa la desnuda muerte,
el rastro del rostro de galas manchado.

Zonzo enjuto el magno escarnio.
¡ Bonito cizañero farfullar!.

En las salas celestes la inminente calma,
constante encendida la pasión apetece,
y deplora envanecida la pompa ufana,
al astro errante del dulce hielo.

Atracadero de pocacidad solaz.
¡Lindo usufructo de algaraza!.

Dónde nadie advierte del jardín la risa,
la púdica brisa que la viga baña,
de hinojos el llanto, diáfana la noche,
de estirpe escarlata al indiferente lingote.

Filfa tétrica atosigante fútil
¡Sublime prórroga hórrida!.

Vasallaje doliente del fúlgido trópico,
conmueve al clavo la ligadura estable,
bálsamo ceñudo en turbulentas ondas,
resbalan diestras su laxitud dichosa.

Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez.