INOCENTE, INOCENTE
Por Adelina Gimeno Navarro
Enviado el 29/12/2018, clasificado en Varios / otros
974 visitas
Estábamos en el año 93, yo trabajaba en una tienda de todo a cien, con mi hermano y mi cuñada.
Con nosotros un chico de los que ya no quedaban, y que ahora casi es un milagro que encuentres a alguien así.
Las 10 de la mañana, de un día 28 ya habíamos hablado en el coche de las inocentadas que podríamos dar. Una sin duda era a esa alma cándida de JoseManuel, nuestro compañero. Como hoy yo estaba resfriada y fue la excusa perfecta para que lo mandase cruzar la calle y fuese a por el jarabe que la farmacéutica tenía para mí. Aquella fue la primera de las seis veces en las que tuvo que recorrer los 7 metros sin apenas rechistar. Tan solo su cara se desencajaba cuando nos tenía que decir que la chica de la farmacia no entendía aquello que le tenía que dar. Nosotros nos pasábamos la pelota, sin miedo a su enfado que ni al descubrir que día rezaba en el calendario fue tal. En estos momentos no sé nada, hace mucho tiempo que no mantengo contacto, pero si alguien puede corroborar aquella inocentada es él.
Amigo y compañero de trabajo que encajó aquella broma como siempre con una sonrisa.
Adelina GN
Comentarios
COMENTAR
¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales