MIENTRAS AMANECIA...
Mientras amanecía, nos encontrábamos juntos en aquel acogedor sofá, el silencio se hacía presente en el ambiente, los sentidos se agudizaban, sumamente perceptibles, podía escuchar tú corazón y danzar al ritmo en que latía, comencé a sentir una piel suave, deslizándose sobre mi mano y antebrazo, una corriente de aire nos recorrió, la obscuridad me cegaba, no sabía que ocurría, los suspiro agitados en tu persona eran más fuerte cada vez, tú saliva en mi cuello hacia denotar lo que sucedía, mi cuerpo se estremecía…
Y todo mientras amanecía, el ambiente se tornó color rojo, el calor de nuestros cuerpos era inminente, sentía como tus labios subían por mi rostro, el tiempo no transcurría, tu boca fue una con la mía, una eternidad paso antes de volver a un estado normal, y todo mientras amanecía, la luz nos alcanzó y caímos de la ilusión, desperté; Todo fue un sueño sin razón.
-¿Has soñado bastante? Espero que si, por que los sueños son la única realidad...
Y todo mientras amanecía.
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