Denunciar relato
EXORBITANTE INDOLENCIA
Con la mirada enmudecida huele,
de ternura la humildad ciega,
vestida con el aire y su dulzura.
Del futuro fiel cada recuerdo,
de las afrentas el rencor fuerte.
Intempestivo en la intemperie,
intemperante impera.
Por el bien perdido piélago inseguro,
en el anzuelo el corazón mordido,
del coraje ocultando flechas.
En la región del malherido tiempo,
el vaivén incierto es blanco cirio.
Ominoso en la omisión,
omnímodo oneroso.
En la hoguera desnuda del agua,
la penumbra el pantano alumbra,
de la noche el inclemente manto.
Como una oveja corteja la cobija,
donde la reja raja y rompe fría.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Comentarios
COMENTAR
¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales