Denunciar relato
Mis ojos dejan entrever un leve atisbo de melancolía;
echo de menos el arrullo de las olas,
el aroma a sal que me envuelve cuando me acerco a él,
el calor del sol acariciándome la piel... tan lejano ahora.
Enero triste y frío.
Mi querido mar, no me sirve verte envuelta en un cálido abrigo.
Necesito revivir en la primavera como las rojas amapolas,
las blancas mariposas, la verde yerba,
arder bajo la luz azul del verano;
mojar mi cuerpo en ti,
dejar atrás al invierno que aletarga mis sentidos.
El frío me aturde el alma.
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