LA BÚSQUEDA
Era una tarde de un domingo cualquiera, de esos ventosos otoños norteños en que aparece la brisa que descompone fisonomías de árboles e inunda de hojas las calles. Después de haber discutido con la última y única persona que consideraba como fiel, y una de las escasas formas de relacionarme y situarme con el exterior, caí en un desconsuelo y abatimiento que me invadió completamente. Sintiéndome perdido, decidí ir a mi pequeña y vieja casa, a las afueras de la gran ciudad, me encerré en el dormitorio de los lamentos, el único del que dispongo donde habito. Y allí, sólamente estaba presente el silencio y unos resquicios de luz se filtraban entre las fisuras de la persiana, que me encargué de cerrar bien para que no penetrase el menor atisbo de claridad. Mi intención, una vez recostado sobre mi incómoda cama, compañera de viaje hacia mi interior, fue, abstraerme del mundo y el tiempo. Y cuanto me sujetaba a ese transcurrir y exclusiva referencia era un simple reloj plateado con una esfera por las que avanzaban sin descanso las agujas de las horas infatigables, del que me desprendí, muestra de mi desinterés por estacionarme en aquella dimensión espacio temporal en la que se encuentra todo ser viviente. Pronto quedé sumido en un profundo sueño, en el que aparecía envuelto en una serie de circunstancias adversas y que por supuesto no eran de mi agrado, comencé a adentrarme en un espiral de tinieblas, sin que yo pudiera sustraerme ante aquellas fuerzas que me dominaban. Mi imagen aparecía difuminada no pudiendo reconocerme. No sabiendo muy bien como situarme ante aquella realidad que atravesaba y que no sabía muy bien como afrontar. Y que suponía mi propia despersonalización. Mi mente se mal nutría de desorientados y pedregosos caminos, y fantasmagóricas imágenes, impidiendo que mi naturaleza siguiera el origen de sus propios pasos, ni el final fuera el deseado por mí. Siendo, sin embargo, ésta mi búsqueda, la lucha incesante por encontrarme con alguien. Ese alguien que soy yo mismo ubicado en el mundo interno y externo.
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