Eterno horizonte...

En el horizonte eterno
esperando tu llegada sin tiempo
llega precisa la noche a mí encuentro
se lleva el calor y viene el frío
los días pasan y el dolor persiste,

No ha podido mi alma olvidarte,
las hojas de otoño me aniquilan
mientras van cayendo una a una,
detrás de mí ventana mi silueta se desvanece...
Sentada en la soledad con el sol en mi espalda
siento como mi cuerpo se congela,
mis ojos secos de tu presencia
inventan lágrimas que queman mi rostro
mientras mi vida sin rumbo,
presa del delirio carcome mis sentidos
pero con calma eterna seguiré esperando
que mis oídos sordos vuelvan a escuchar tu presencia...