Denunciar relato
Intenté buscar la felicidad abriendo puertas en las que creía que me la iban a facilitar.
Fue una opción muy egoísta por mi parte pensar que algo o alguien me la tendría que dar.
Me agobié y culpé "al destino" y a los demás por no encontrar, ni lo que yo mismo quería ni sabía que buscaba.
Hasta que un día miré para adentro y vi una puerta abierta, sin cerrojo... Que me gritaba a voces:"entra"... No lo dudé y tras cruzar "ví" mi interior, y descubrí un mundo desacomplejado, infinito en opciones y con muchas ganas de ver, aprender y comprender... Y también me dí cuenta que la mayor pasión... Eres TU MISMO.
Comentarios
COMENTAR
¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales