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<LOS FIRULETES>

Como un tributo al idioma

que todos utilizamos

y que hoy conmemoramos;

sin ninguna reconcoma

te invito a que uses la coma,

el punto y coma y la tilde.

Si eres de origen humilde,

o del modesto estrato diez

te tienes que convencer

que esto, para todos rige.

Cuando por su ausencia brillan

los signos de puntuación,

entonces la comprensión

de lo escrito, trastabilla;

por eso, pon las comillas,

los signos de admiración,

corchetes e interrogación,

paréntesis, los dos puntos;

para que, entre todos juntos

cuidemos el español.

Usar bien los firuletes,

los puntos sobre las íes,

y que las tildes nos guíen

para salirnos del brete

en el que el idioma nos mete

cuando de usarlos se trata:

la diéresis, crema o nata,

la virgulilla ondulante,

pretenciosa e insinuante

que, sobre la ene cabalga.

En fin, invitarte quiero

a que de hoy en adelante

con ánimo vigilante,

mente abierta y mucho celo,

pongas cuidado y esmero.

Así, cada vez que escribas

no habrá nadie que te diga

de una forma asaz intrusa

que sobró o faltó una pelusa (1),

para amargarte la vida.

(1) Tilde.