De cómo surgió el icónico peinado de Freddie Mercury
Por Hercule Torvisco
Enviado el 22/07/2021, clasificado en Varios / otros
1092 visitas
Febrero de 1981. La banda de rock inglesa Queen había viajado a Argentina por primera vez (y, a la postre, única) para dar tres conciertos en Buenos Aires (formaba parte de las atracciones del Carnaval promovido por el Club Atlético Vélez Sarsfield [club de fútbol fundado hace más de 100 años y convertido, con el paso del tiempo, en una de las instituciones deportivas, culturales y educacionales más importantes del país]), uno en el Mar del Plata, y otro en la ciudad de Rosario.
Freddie Mercury, vocalista y pianista de Queen, que contaba entonces treinta y cuatro años, quería un retoque capilar y solicitó un profesional en la materia, así que las autoridades del prestigioso Sheraton Buenos Aires Hotel, un edificio de estilo racionalista (escuela de Chicago) ubicado en el barrio porteño de Retiro, donde estaban alojados los miembros de la banda, no dudaron y convocaron a Miguel Romano, un reconocido peluquero, que no sabía quién era el cliente.
MIGUEL ROMANO: "Me llamaron directamente del Sheraton y me mandaron un auto con chofer. Cuando llegué, vi que había mucha gente alrededor y entendí que era alguien importante. A la noche, cuando llamé a mi hija, Paola, que estaba en Miami, me contó y ahí supe quién era. Tuve otras figuras, como Sophia Loren, pero no fue como esto. Me encontré con un hombre con ondas, rulos y el cabello largo, por debajo de los hombros. Entonces le aconsejé: 'Mirá, lo mejor es hacerte un corte moderno o dejarte largo, como se usa ahora, y acomodártelo'''.
(Al día siguiente lo volvieron a llamar para que le hiciera el corte de pelo. Miguel Romano fue tres días seguidos a cortar y peinar al británico, con quien "iba viendo cómo quedaba" el look.)
MIGUEL ROMANO: "Se lo corté cortito, y así actuó. No volví a verlo (profesionalmente, ya que asistió como invitado a uno de los recitales). Lo loco es que con ese cambio de look fue que con él continuó hasta el final de sus días. Fui como un peinador estrella para él, pero yo me creía y me creo un peinador común".
(Algo que llamó la atención del peluquero fue que el batería de la banda, Roger Taylor, iba recogiendo de la alfombra los mechones cortados del oscuro pelo del nacido en la isla de Zanzíbar ["Nunca supe para qué los quería. Ni pregunté, tampoco"].)
MIGUEL ROMANO (sobre Freddie Mercury): "Era un encanto, un amor de gente. Muy simpático, muy cariñoso, pero también era muy tímido. Recuerdo sobre todo la dulzura y la amabilidad. Él no decía casi nada. Yo fui con mi asistente y mi traductora (la actriz María Teresa Connor)".
Así pues, Miguel Romano se convirtió en el artífice de uno de los cambios más radicales en una figura histórica del mundo de la música.
Además del intérprete de "Another One Bites the Dust", entre sus manos pasaron algunas de las cabezas de las personalidades más importantes de Argentina: Evita, María Estela Martínez de Perón, Susana Giménez, Ernestina Herrera de Noble, Amalita Fortabat, y Mirtha Legrand.
Comentarios
COMENTAR
¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales