Imaginemos el día en sus mejores soportes, y hagamos realidad la hermosura de cada momento. Nos soñaremos para avanzar.
Nos hemos de tratar con la más óptima consideración. Nos imprimiremos carácter con bondad, con anhelos nobles, desde el altruismo que no juzga. Progresemos con mirada de futuro y oportunidad. No seamos obstáculos para vivir.
Como consejo, nos debemos apasionar. Hallaremos motivos para complementar lo que nos falte. No aceptemos el vacío o el mareo permanente. Nos debemos dar explicaciones en positivo.
Visualicemos. Pronostiquemos sin corazas. Nos hemos de entender. La belleza es infinita. Está en todas partes. No permitamos que nos devasten. Hay muchas causas para la felicidad, y todas están interrelacionadas.
No nos agitemos porque sí. No asumamos el rechazo. Podemos ser en lo fácil. No estemos en la reserva que ahoga. Obtengamos lo que ansiamos.
La intimidad nos sacará de la selva. No claudiquemos. Nos ayudaremos. Sentémonos y oteemos lo que sucede. Vayamos donde haga falta. ¡Hay tanto!
Juan TOMÁS FRUTOS.
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