EL SOLDADO (PARTE 2)

Después de los días en cubierto mi padre logro determinar varias estrategias para liberar al prisionero, él había detectado varias salidas y debilidades del grupo terrorista, había fugas de información por todas partes, era obvio, la corrupción estaba por doquier, no había diferencia con el gobierno que tanto criticaban, eran un grupo con ansias de poder, no buscaban mas que el beneficio propio.

El día llego, la hora se había establecido, mi padre era el encargado de darle comida y agua al secuestrado, por lo tanto sabia que el sujeto estaba vivo y en condiciones aceptables para su estado, la información se esparció como pólvora: algunos fanáticos sospechaban y sugerían que había un delator o un espía entre el grupo terrorista, sin embargo para fortuna de mi padre nadie tenia la ligera sospecha de que fuera el. Las sospechas se convirtieron en realidad y ante esta situación los terroristas optaron por matar sanguinariamente a quien creían era culpable y como consecuencia el líder terrorista decidió mandar un mensaje al ejército:

“Descubriré  al espía que han mandado y les mandare el cadáver echo cachitos, así que tienen que retirarlo y desistir de cualquier plan para liberar al prisionero, la libertad será otorgada en cuanto el ministro entregue su renuncia por escrito y en publicidad masiva, si no lo hacen como se les ha dicho anteriormente, los cadáveres seguirán subiendo de cantidad”

Dicho mensaje sorprendió a mi padre, por lo que decidió adelantar los planes, mando un mensaje escondido en los desechos de comida a su jefe inmediato:

“La situación esta comprometida, el águila levantara vuelo al amanecer, a primera hora”

Y fue así, el águila levanto el vuelo al amanecer, todo había sido indetectado, el joven y mi padre se trasladaban sigilosamente hacia la salida, hasta que el celular del secuestrado sonó, fue el sonido mas fuerte de la mañana, la llamada había marcado el destino de ambos. El joven salió corriendo, nadie lo pudo detener, el miedo fue su motor para salir de esa terrible situación, fue inesperado, nadie se esperaba la huida del muchacho, inmediatamente salió, durante la noche mi padre le había explicado las salidas mas factibles para el, así que fue muy fácil para el saber cuando y por donde escapar. Inmediatamente el muchacho se puso a salvo, lo revisaron los médicos de la base y lo sacaron del lugar junto con su padre. Al menos él lo vio de nuevo con vida y estaba con el.

Por otra parte el destino de mi padre fue terrible, los terroristas lo tomaron como un recordatorio del porque ellos tenían que estar en el poder. La tortura fue aterradora, uno a uno sus dedos fueron fracturados; sin importar si eran de sus manos o pies, el dolor era insoportable, el llanto y grito de dolor eran aterrorizantes. Los golpes en todo el cuerpo eran imparables, parecía que en lugar de ser un cuerpo humano, solo fuera un balón de piel para patear; su rostro quedo completamente desfigurado y sus huesos hechos pedazos. Para terminar con su dolor, el terrorista le disparo en la cabeza, inmediatamente cayo al piso sin vida, la fuerza de gravedad lo llevo contra el piso.

En ese mismo momento mi padre estaba oficialmente muerto, su cadáver fue lanzado a la calle para que sus compañeros recogieran lo que había quedado de aquel hombre valiente. Sin embargo nosotros, su familia aun no lo sabíamos.

Yo me quede esperando ver la silueta de mi viejo, pero solo el recuerdo quedo, nadie jugaría conmigo este, ni los próximos veranos, al poco tiempo el teléfono de la sala volvió a timbrar, pero esta vez solo era para avisar lo indeseable, mi padre había muerto en manos de los terroristas, el llanto de mi madre me rompió el corazón, todo estaba dicho, él había muerto en su deber. Y yo aprendí a cuidar y proteger con su ejemplo; no solo a mi familia, también a los que no conozco, sin olvidar que todos merecemos vivir y estar en un lugar mejor